Todas las mujeres sabemos que los cólicos y la hinchazón durante el período menstrual son cosa normal, sin embargo, cuando estas situaciones se presentan de manera excesiva podrían ser indicativo de que algo no está marchando bien en nuestro cuerpo. Una de las causas puede ser la endometriosis, de la cual te contaré a continuación, pues este trastorno, en caso extremo, desemboca en una condición de infertilidad.
¿Qué es endometriosis?
Para poder entender qué implica tener endometriosis comenzaré por decirte qué es el endometrio. Se trata de la pared interna del útero (la pared externa se llama miometrio) y desde que sucede la primera menstruación, cada 28 días (o lo que dure tu período), esa pared interna se hace más gruesa ya que se prepara para recibir un óvulo fecundado pues esa es su misión y cuando esto no sucede, el crecimiento endometrial es desechado por el organismo a través del sangrado menstrual.
Ahora que tenemos claro qué es y dónde está el endometrio, será más fácil explicarte qué es la endometriosis: se trata del crecimiento de tejido endometrial fuera del útero, esto generalmente sucede en los órganos de la zona pélvica (ovarios, trompas de Falopio, intestino, vejiga, etc.) aunque en algunos casos, los menos comunes, se puede extender hacia los pulmones o el corazón.
Antes de caer en pánico, desglosemos tanto la endometriosis como los riesgos de que esta genere infertilidad.
Por qué se genera
¿Por qué aparece este tejido donde no debe? De acuerdo con los expertos, hasta ahora no se sabe a ciencia cierta el porqué de la aparición de tejido endometrial fuera del útero, pero Clínica Mayo apunta las siguientes posibilidades:
- Menstruación retrógrada. Se presenta cuando el sangrado menstrual regresa a través de las trompas de Falopio hacia la cavidad pélvica en lugar de salir del cuerpo. Esto provoca que las células endometriales presentes en esa sangre se adhieran a las paredes pélvicas y a las superficies de los órganos pélvicos (como si fuera el útero) ahí, cada ciclo menstrual crecen y se continúan engrosando y sangrando.
- Transformación de células peritoneales. Se conoce como la “teoría de inducción”, y dice que las hormonas o los factores inmunitarios causan que las células peritoneales (que recubren la parte interna del abdomen) muten en células similares a las del endometrio.
- Transformación de células embrionarias. Se cree que hormonas tales como el estrógeno pueden transformar las células en las primeras etapas de desarrollo (embrionarias) en implantes celulares similares a los del endometrio durante la pubertad.
- Después de una cirugía en la zona del abdomen bajo (como una cesárea) las células endometriales pueden adherirse al tejido cicatrizal de la incisión quirúrgica.
- Los vasos sanguíneos o el sistema linfático pueden transportar células endometriales a otras partes del cuerpo.
- Una vez que las células endometriales se han instalado fuera del endometrio, un problema en el sistema inmunitario puede hacer que el cuerpo sea incapaz de reconocer el problema y destruir el tejido endometrial que está creciendo fuera del útero de manera anormal.
Este padecimiento de la endometriosis es ocasionado por la adherencia anormal de células endometriales en cualquier parte distinta de la cara interna del endometrio, ya estando ahí este tejido cumple su ciclo normal: crece, y al no haber embrión implantado se desecha a través de la sangre, con la particularidad de que, al no estar en el útero, ese desecho no tiene cómo salir del cuerpo y es ahí cuando empiezan las inflamaciones y los dolores.
Síntomas
- El dolor extremo puede ser un indicativo de endometriosis, pero este no es una ley, hay casos de mujeres con mucho dolor y que tienen principios de la enfermedad mientras que otras nunca presentan dolores y llevan años desarrollando esta condición.
- Tener dolor durante o después del coito también puede ser un síntoma de endometriosis.
- Inflamación abdominal, estreñimiento, diarrea o sangrado rectal.
- Constante sensación de tener que orinar, dolor o sangrado al hacerlo.
- Dolor del hueso púbico.
Por favor recuerda que esto es solo una guía, nunca un reemplazo de una consulta y valoración médica, si presentas alguno de estos síntomas lo indicado es que consultes con un ginecólogo, que la persona indicada para hacer los estudios pertinentes y poder llegar a un diagnóstico y tratamiento correcto.
Endometriosis e infertilidad
En casos extremos, la endometriosis complica que un óvulo sea fecundado, esto puede presentarse cuando las células se implantan en los ovarios o en las trompas de Falopio. El tejido anormal puede impedir que los ovarios liberen óvulos o bien que las trompas estén bloqueadas y estos no puedan ser alcanzados por el esperma.
Debes saber que la endometriosis no tiene cura, los tratamientos existentes son para controlar el crecimiento del tejido endometrial ectópico, por lo tanto, cuando una mujer es diagnosticada a temprana edad y aún no ha sido madre, su médico tratante podría recomendarle buscar el embarazo lo más pronto posible, pues con el paso del tiempo el crecimiento endometrial podría impedir lograrlo.
Afortunadamente, la ciencia está tan avanzada que existen distintas alternativas que podrían lograr un embarazo exitoso aún con endometriosis, no obstante, esto puede llegar a ser muy desgastante en lo emocional y en lo económico, es por eso que es mejor tener el hábito de hacernos un chequeo médico anual completo, de esta manera podemos tener control y un panorama completo de la condición clínica de nuestro organismo y, en caso de necesitarlo, iniciar un tratamiento médico de manera oportuna.
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