Los juegos, cuentos y otras actividades son un gran apoyo para el aprendizaje de los peques, además es una forma en la que pueden reforzar en casa los conocimientos vistos en la escuela. Con estas adivinanzas para niños pasarás un rato muy divertido con tus traviesos.
Involucrarte en las tareas de tus peques y en lo que pasa en la escuela no solo te ayudará a fortalecer el vínculo con tus hijos, también es una manera de detectar cuándo algún tema les cueste trabajo para poder ayudarlo a tiempo, para evitar que se afecte su desempeño escolar.
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¿Qué son las adivinanzas?
Las adivinanzas son frases que describen una cosa de manera indirecta, para que alguien adivine de qué se trata.
El Diccionario Oxford detalla que las adivinanzas son acertijos, que suelen llevar rima, además de ser un juego popular y un instrumento de aprendizaje para los niños.
Muchas de las adivinanzas para niños tienen el objetivo de transmitir un concepto, ya sea animales u otros objetos.
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Beneficios de las adivinanzas para niños
Además de ser una actividad muy divertida, las adivinanzas tienen muchos beneficios. Sara Tarrés, especialista en psicología infantil, nos comparte algunas de las ventajas que tiene jugar con estas frases para el aprendizaje de los peques:
- Mejoran la comprensión del lenguaje.
- Favorecen el aprendizaje de nuevas palabras.
- Contribuyen al desarrollo del pensamiento y la capacidad de resolución de problemas.
- Aumentan la atención y la concentración.
- Estimulan la memoria.
- Refuerzan los aprendizajes.
- Favorecen el proceso de asociación de ideas.
- Impulsan la imaginación, curiosidad e ingenio.
- Fortalecen el vínculo entre hijos y padres, o con quien juegue esta actividad.
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Lista de adivinanzas para niños cortas y fáciles
Recopilamos estos acertijos del libro El maravilloso mundo de las adivinanzas para que juegues con tus traviesos:
- ¿Cuál es la planta que asusta? El bambúúúúú.
- ¿Cuál es el pan que cubre las piernas? El pantalón.
- Choco entre dos paredes, late mi corazón. El chocolate
- Blanca por dentro, verde por fuera. Si quieres que te lo diga, espera. La pera
- ¿Quieres té? ¡Pues toma té! ¿Sabes ya qué fruto es? El tomate.
- La A, anda. La B, besa. La C, reza. ¿Qué fruta es esa? La cereza.
- Redondo como la luna y blanco como la cal. Me hacen de leche… ¡y ya no te digo más! El queso.
- Aunque no es un hombre, lleva sombrero y al cesar la lluvia sale el primero. El champiñón.
- Agua pasa por mi casa, cate por mi corazón. El aguacate.
- Roer es mi trabajo, el queso mi aperitivo y el gato ha sido siempre mi más temido enemigo. El gato.
- Salta y salta, y la colita le falta. La rana.
- ¿Cuál es el animal que come con las patas? El pato.
- Vuelo de noche, duermo de día y nunca verás plumas en ala mía. El murciélago.
- Cuando nada en los ríos parece un tronco flotante, pero si muestra sus dientes
todos huyen al instante. El cocodrilo. - Tengo agujas pero no sé coser, tengo números pero no sé leer, las horas te doy, ¿Sabes quién soy? El reloj.
- Antes huevecito, después capullito y más tarde volaré como un pajarito. ¿Sabes quién soy? La mariposa.
- Soy bonito por delante y algo feo por detrás, me transformo a cada instante ya que imito a los demás. ¿Sabes quién soy? El espejo.
- Oro parece, plata no es. Abran las cortinas y verán lo que es. El plátano.
- Sal al campo por las noches si me quieres conocer, soy señor de grandes ojos, cara seria y gran saber. ¿Quién soy? El búho.
- Cabeza de hierro, cuerpo de madera, si te piso un dedo, ¡Qué grito pegas! ¿Qué es? El martillo.
- Me llegan las cartas y no sé leer y, aunque me las como, no mancho el papel. ¿Qué es? El buzón.
- En tus manos limpio, en tus ventanas sucio. Si sucio, me ponen limpio, y si limpio, me ponen sucio. ¿Qué es? El pañuelo.
- ¿Qué cosa es? ¿Qué cosa es? Que corre mucho y no tiene pies. El viento.
- Te la digo, te la digo, te la vuelvo a repetir, te la digo veinte veces y no me la sabes decir. ¿Qué es? La tela.
- Si soy joven, joven quedo. Si soy viejo, viejo quedo. Tengo boca y no te hablo. Tengo ojos y no te veo. ¿Quién soy? El retrato.
- Soy ave y soy llana, pero no tengo pico ni alas. ¿Sabes quién soy? La avellana.
- Blanco es, la gallina lo pone, con aceite de fríe y con pan se come. ¿Qué cosa es? El huevo.
- Todos me quieren para descansar. No lo pienses más. La silla.
- Todos pasan por mí, pero yo nunca paso por nadie. Todos preguntan por mí, pero yo nunca pregunto por nadie. ¿Qué es? La calle.
- Alta como un palo, cabeza arriba y solo come hojas que están encima. ¿Qué es? La jirafa.
- Y lo es, y lo es, y no me lo adivinas ni en un mes. ¿Qué es? El hilo.
- Mi picadura es dañina, mi cuerpo insignificante, pero el néctar que yo doy, os lo coméis al instante. ¿Qué es? La abeja.
- Es pequeño como una pera, pero alumbra la casa entera. ¿Qué es? El foco.
- Tiene dientes y no come, tiene cabeza y no es hombre. ¿Qué es? El ajo.
- Desde el lunes hasta el viernes soy la última en llegar, el sábado soy la primera y el domingo a descansar. ¿Quién soy? La letra S.
- Abierta siempre estoy para todos los niños. Cerrada y sola me quedo los sábados y domingos. La escuela.
- En rincones y entre ramas mis redes voy construyendo, para que moscas incautas, en ellas vayan cayendo. La araña.
- Soy redonda pero no soy pelota, soy verde pero no soy hierba, soy roja pero no soy fuego, aunque tengo semillas negras como el carbón. La sandía.
- Me abrigo con paños blancos, luzco blanca cabellera y por causa mía llora hasta la misma cocinera. La cebolla.
- Va caminando por su caminito no tiene prisa y va despacito. ¿Quién va? La vaca.
- Negro fui rojo seré convertido en ceniza me veré. El carbón.
- Tómame con cuidado, pues soy muy chiquita. Cuando me siembras me transformo en plantita. La semilla.
- ¡Pi!, cantan los pájaros, miento y digo la verdad; por muy listo que seas, creo que no acertarás. ¿Quién soy? El pimiento.
- Camino sin tener patas, a cuestas llevo mi casa. Por donde mi cuerpo pasa queda un hilillo de plata. El caracol.
- Suena a la misma hora todas las mañanas, para decirnos a todos: ¡Fuera de la cama! El despertador.
- Crezco en el fondo del mar y en la arena de la playa tú me puedes encontrar. La concha.
- En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene, no más. El mar.
- Haciendo ruido ya vienen, haciendo ruido se van; y cuando mañana vuelvan, de igual manera se irán. Las olas.
- Tul y no es tela. Pan, pero no de mesa. El tulipán.
- Los dátiles son mi fruto y palmas doy a lo bruto. La palmera.
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Ideas para jugar adivinanzas con niños
Las adivinanzas son muy divertidas y ayudan a reforzar los conocimientos, para hacerlo más entretenido te puedes ayudar de las siguientes plantillas:
Las adivinanzas ayudan a tu peque a reforzar conocimientos ya prender más sobre animales, frutas, u otros objetos; además de que tiene muchos beneficios para su desarrollo cognitivo.
Cuéntanos en Facebook que te parecen estas adivinanzas para niños y cuáles otras conoces.
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