Queridos hijos míos,
Esta carta es de una mamá con burnout, de una mamá desesperada, de una mamá que se siente completamente rebasada. Esta carta habla de mí y no sé ni por dónde empezar. Sólo sé que necesito expresar todo lo que llevo en mi corazón. En este día de la madre, quiero decirles lo mucho que los amo y lo importantes que son para mí. Sin embargo, también quiero hablarles de algo que me ha estado afectando mucho y que siento que debo compartir.
Últimamente, he sentido que el mundo entero está sobre mis hombros. La carga de trabajo y los quehaceres en el hogar se han incrementado tanto que me siento agotada todo el tiempo. Ya no puedo con las tareas del colegio, las responsabilidades del hogar, el cuidado de ustedes y el trabajo que tengo que hacer. Siento que todo se me está escapando de las manos y no sé cómo hacer para recuperar el control.
Sé que últimamente me he mostrado diferente, que a veces me desespero y les grito, que me falta paciencia y que me cuesta concentrarme como me gustaría. Quiero que sepan que no es por ustedes, que nunca lo ha sido y nunca lo será. Es simplemente que estoy cansada, que siento que no tengo tiempo para mí misma, que he descuidado mi cuerpo y que me siento culpable por no pasar el tiempo de calidad que sé que se merecen.
Me siento atrapada en una espiral de trabajo y responsabilidades que parece no tener fin, esto me ha llevado a un estado de burnout que no me permite ser la madre que quiero ser para ustedes. Me doy cuenta de que estoy descuidando mi salud física y emocional y eso me hace sentir aún peor. Me siento como si estuviera fallándoles, como si no estuviera siendo la madre que merecen.
Quiero que sepan que me arrepiento profundamente de cada vez que les he hablado mal, que les he gritado o que les he hecho sentir que no los amo. Porque son lo más importante en mi vida y nunca, nunca querría lastimarlos.
Sé que puede ser difícil entender todo esto, pero quiero que sepan que siempre estaré cuando me necesiten, a pesar del agotamiento, a pesar del estrés, siempre serán mi prioridad. Necesito que entiendan que nunca dejaré de amarlos, de apoyarlos y de hacer todo lo que esté en mi poder para asegurarme de que tengan todo lo que necesitan para ser felices y exitosos en la vida.
Espero que algún día puedan perdonarme por mis errores. Y sí, en este día de la madre, quiero prometerles que voy a hacer todo lo que esté en mi poder para recuperar el control de mi vida y poder brindarles el tiempo y la atención que merecen.
Los amo más allá de las palabras, mis pequeños ángeles.
Con todo mi amor,
Mamá.
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